¿Y si hoy fuera el último día?
¿Qué cosas nos faltaría decir, que abrazos nos faltaría dar, cuantos te quiero, perdóname, te extraño se irían incompletos con nosotros?
Tomar la vida por hecho es un error que todos podemos cometer. La invitación para hoy es valorar cada día como si fuera el último, proteger nuestro tiempo, tener nuestras prioridades en orden, arreglar esas situaciones inconclusas o no resueltas que nos roban la paz. No nos acostumbremos a vivir a medias, a estar sin hablar, a tratarnos como extraños y a veces hasta como enemigos. ☹
Hoy es un nuevo día, es una nueva oportunidad, para perdonar, sanar, valorar y agradecer el privilegio de vivir, de poder amar, de seguir respirando e incluso si es necesario volver a empezar. 😊
Sandra Aguillon
2 Coritnios 4:16 «Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día«